Invitado al programa 678, el candidato a vicejefe de Gobierno porteño por el Frente para la Victoria, Leandro Santoro, se refirió a las denuncias por corrupción que salpican al candidato de ECO, Martín Lousteau, y analizó los dos modelos en juego en las elecciones que se realizarán este domingo en la Ciudad de Buenos Aires.

“La corrupción no se debate, se condena, se investiga, tiene que actuar la Justicia; hay que investigar las acusaciones de Bercovich”, advirtió el compañero de fórmula de Mariano Recalde en relación a las denuncias del periodista contra asesores del candidato de ECO.

Santoro consideró que “a Lousteau le da vergüenza el radicalismo”, pero “lo termina utilizando porque necesita una estructura que fiscalice la elección, y que lo ayude a financiar su campaña de publicidad”, y en este sentido, deslizó: “Pobre los radicales que están con Lousteau de socios, porque este señor lo único que hizo fue intentar sacárselos de encima”.

En la misma línea, el invitado de 678 recordó que el candidato de ECO “no se hace cargo del radicalismo” mientras que “el radicalismo ha sido muy solidario con él”, y por esta razón, se preguntó: “Quisiera saber qué sienten los radicales, de estar militando por un candidato que no se hace cargo del radicalismo, que esconde”.

“Lo que vemos con Martín Lousteau es la expresión política más clara del individualismo, es una construcción individualista, donde el radicalismo está siendo usado, y cuando le toque gobernar, lo va a hacer como lo hace Macri, con muchos empresarios que son socios de dirigentes radicales”, disparó el candidato a vicejefe porteño.

Por otro lado, Santoro diferenció los modelos en juego este domingo, y aclaró que “el tema es quien gobierna la Ciudad de Buenos Aires, los empresarios y las corporaciones, o la gente y la política”.

“La propuesta que expresamos con Mariano Recalde, es empoderar a la sociedad y darle poder a la política, para que le ponga límites a las corporaciones, que en la Ciudad de Buenos Aires hacen negocios multimillonarios”, concluyó el invitado.