El presidente de los Estados Unidos llegó acompañado de una gran comitiva entre la que se encontraba el vice, John Kerry, en lo que significa su visita oficial a Italia.

A las 10:30 (hora italiana) llegó el mandatario a la reunión y fue recibido por Francisco que le dijo: "Bienvenido, señor presidente", a lo que Obama respondió: "Es maravilloso conocerlo, muchas gracias".

De esta manera, Obama y el Papa mantuvieron un encuentro de unos 50 minutos, media hora más de lo protocolar en este tipo de reuniones. Aunque, mucho menos de lo que fue el último encuentro con la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, de casi dos horas en privado.

El primer acercamiento entre Obama y Francisco se dio en la Sala del Tronetto, anexa a la Biblioteca Privada, donde se reunieron después. Luego de unos minutos de introducción, los periodistas se retiraron y siguieron la charla en privado.

Al igual que al resto de mandatarios, Jorge Bergoglio le regaló a Obama su primera exhortación apostólica, "Evangelii Gaudium" y un medallón artístico que representa al "Ángel de la Paz".

En una de las salas adyacentes esperó la amplia delegación estadounidense, con John Kerry a la cabeza, acompañada por el arzobispo Ganswein.