Matías Chiocconi, de 30 años y oriundo de Junín, falleció en la tarde del miércoles mientras nadaba en las piscinas naturales de la playa de Barra de Lagoa, mientras que Jorge Aquino, un comerciante de 35 años de Oberá, Misiones, murió ese mismo día a las 13 tras sufrir una descompensación mientras nadaba en el mar en Itapema, donde pasaba sus vacaciones con su esposa y sus tres hijos, explicó el cónsul argentino en Florianópolis, Gustavo Coppa. 

El diplomático afirmó que la muerte de Chiocconi es el quinto deceso de turistas argentinos en lo que va del año en el estado de Santa Catarina, donde está Florianópolis. “El consulado trabaja prácticamente las 24 horas para asistir a los familiares”, explicó.

Según se informó, Chiocconi pasaba sus vacaciones en Canasvieiras junto con sus familiares y había ido a pasar el día a Barra de Lagoa, donde falleció a pesar de los intentos de los paramédicos para reanimarlo. Se conoció que su cuerpo será trasladado a Junín por la compañía de seguros que había contratado el viajero. 

Barra de Lagoa tiene piscinas naturales, pero ese día el mar estaba violento a raíz de los fuertes vientos, explicaron desde el cuartel de Bomberos local. 

En tanto, en el caso de Aquino, los guardavidas lo retiraron del mar y percibieron que había vomitado. En la tentativa de reanimarlo, los bomberos lo transportaron a un hospital en el helicóptero Arcanjo de Florianópolis, pero el equipo mé­dico de la aeronave no logró su objetivo después de más de una hora de intentos. 

El cuerpo sin vida fue trasladado al Instituto Médico Legal de Camboriú, al norte de Santa Catarina, para la correspondiente autopsia. 

Por otro lado, el lunes también había fallecido Haydée Colman, una porteña de 51 años. Ocurrió cuando regresaba de la playa, en Camboriú, a raíz de un paro cardiorrespiratorio, según explicó el Consulado.