Parece mentira que todavía haya gante que caiga en las estafas piramidales con la cantidad de información que existe al respecto, pero increíblemente todavía sigue resultando y haciendo caer a los incautos.

Claro que también están los que quieren aprovechar el ruido que generar, entrar rápido cuando dan dividendos para atraer a más interesados, y liquidan enseguida para evitar quedar atrapados.

Pero este no es el caso de este joven que se subió al esquema Ponzi por la promesa de duplicar su dinero en solo cuarenta y cinco días.