La polémica se desató tras que Aguer publicara una columna bajo el título "la fornicación", en la que cuestiona abiertamente las prácticas sexuales de la sociedad porque "igualdad de género permite otras combinaciones, antinaturales", al tiempo que renegó de la masturbación y de las distintas formas en que las personas viven la sexualidad. 

Consultado al respecto por Ernesto Tenembaum, en Radio Con Vos, el prelado justificó su artículo al asegurar que "es una crítica a las costumbres" y que "no plantea cuestiones teológicas, religiosas, sino racionales".

Sobre el 'petting', como se le dice a la masturbación en pareja, dijo que "si alguien quiere toquetearse que lo haga, pero no en la puerta de la Catedral", lanzó el arzobispo en un momento de la entrevista. 

La columna del monseñor despertó tanto malestar, que hasta el secretario de Derechos Humanos del gobierno nacional, Claudio Avruj, señaló que el religioso "merece el rechazo de todos" por su "posición autoritaria" y "discriminadora".

Aguer también cuestionó un montón de elementos de la vida cotidiana que se desarrollan con total normalidad en nuestra sociedad. Entre los ejemplos, cuestionó "los casos de fornicación que se dan en el mundo de la farándula" y también criticó la entrega de 450.000 preservativos destinados a la Villa Olímpica.

En este sentido, reiteró que le pareció "raro y exagerada" la cantidad de preservativos que se entregaron en los Juegos Olímpicos y agregó que "el concepto y percepción de la naturaleza han desaparecido. Hay una desnaturalización de la función sexual", consideró.