La píldora anticonceptiva es uno de los hitos de la liberación femenina pero la historia detrás del desarrollo de la píldora no es exactamente para eso.

Según cuenta el portal de la BBC, sus creadores, John Rock y Gregory Pincus, lo hicieron por razones médicas no para generar libertades. Al parecer Rock era un católico devoto y para él era importante obtener la aprobación del Vaticano. Quería que su sistema anticonceptivo fuera lo más parecido posible al proceso "natural" que atraviesa la mujer.

La Iglesia católica ya había aprobado el sistema de anticoncepción natural que consiste en dejar de tener sexo durante el periodo de ovulación, cuando la mujer es fértil. Por eso, Rock pensó que si su método emulaba el ciclo natural podría también lograr el visto bueno del Papa.

La píldora fue aprobada en 1960 y fue un boom pero, aunque la Iglesia tardó casi una década en pronunciarse públicamente, finalmente lo hizo rechazando el método por considerarlo "artificial".

El sistema creado por Rock y Pincus requiere que las mujeres sigan con mucha atención el ciclo de toma ya que si olvidan alguna dosis se pierde la efectividad anticonceptiva. Entonces, preocupado de que su esposa se olvidara de tomar su píldora diaria, un hombre llamado David Wagner diseñó en 1961 un envase redondo que permite ver si la mujer estaba tomando la píldora correspondiente o no.

"Fácil. Para que tú se lo expliques… y ella lo use", decía un anuncio de 1964 de la empresa Ortho-Novum.

Pero no todo es felicidad, expertos y médicos del mundo indican que el uso de estas píldoras tiene consecuencias nocivas en los cuerpos de las mujeres. Consecuencias que van desde la pérdida de memoria hasta cambios hormonales brutales y depresión.