El provocativo premio a la "profundidad periodística" de Clarín en el caso Maldonado
El Foro del Periodismo Argentino (FOPEA) destacó a Claudio Andrade quien desde las páginas del 'gran diario argentino' citaba "fuentes confiables" que a Santiago lo había matado un puestero de la zona, que estaba 'clandestino' para defender la causa Mapuche, que lo había visto después de su desaparición en una fiesta en El Bolsón, que estaba en San Luis, en el litoral, sin contar las hipótesis que configuraban al joven artesano como un terrorista.
El Foro del Periodismo Argentino (Fopea) hace tiempo ya, dejó de ser una referencia destacada entre las organizaciones que distinguen el compromiso periodístico.
Además de estar formado cada vez más por dueños y empresarios de medios y no por trabajadores de prensa, el Foro es presidido por Néstor Sclauzero, gerente de Noticias de la TV Pública, básicamente la persona que mantiene la bajada de línea sesgada por intereses oficialistas en el canal público de noticias.
“Para un tipo de las cavernas como yo es un inmenso honor”, dijo desde el estrado Andrade que ni siquiera se esforzó en justificar o contar los pormenores de su trabajo como cronista al servicio del discurso represivo de la ministra Patricia Bullrich.
Durante los primeros días del estallido que significó la desaparición del joven platense, en medio de un operativo de represión de Gendarmería en la Pu Lof de Cushamen a la comunidad mapuche, Andrade fue quien embarró la cancha siempre criminalizando la causa de este pueblo originario.
En sus artículos configuró varias noticias falsas: que un puestero de la zona lo había asesinado con un arma blanca, que se había "autodesaparecido" para beneficiar la causa mapuche, que lo habían visto en un fiesta dos emses después de su desaparición, que estaba en Chile, en San Luis y más tarde en el Litoral, siempre sosteniendo la hipótesis de la pertenencia de Santiago a grupos terroristas.
En el concreto mensaje de Sergio Maldonado se sintetiza lo que despertó esta premiación en la familia de Santiago, víctimas de la campañana macrista por demonizar al joven artesano, muerto en circunstancias demasiado dudosas como para creer el relato oficial.
Como si fuera poco, hace pocos meses, el periodista galardonado advertía que había recibido amenazas y acusaba a La izquierda Diario de encarar una campaña para dar a conocer su rostro y así generar una condena social. Una de las respuestas a su tuit lo dejó muy mal parado: cinco días después de la desaparición, fue uno de los primeros hombres de Clarín en aparecer en los informes televisivos.