Monzó lo admitió: "No me gusta el timbreo"
Cuando la sesión se alargaba y el debate por el presupuesto se extendía, Graciela Camaño y el presidente de la Cámara de diputados, Emilio Monzó, tuvieron un cruce que despertó las risas de todo el recinto.
En el Congreso suelen darse este tipo de cruces picantes y cargados de significado político, Emilio Monzó, un viejo zorro de la Cámara de Diputados, recogió al vuelo el cruce de Camaño y soltó la frase que hizo reír a todos.