Mauricio Macri volvió a la clínica por su rodilla operada
El Presidente fue infiltrado este domingo y se hizo plantillas especiales. Fue acompañado al Instituto del Diagnóstico por un operativo de seguridad discreto, donde permaneció hasta las 19 hs. El jueves se había hecho otro control.
El presidente Mauricio Macri concurrió este domingo al Instituto del Diagnóstico para seguir una serie de pasos ordenados por el médico traumatólogo Jorge Batista, quien lo operó en junio de la rodilla derecha.
Según informó Presidencia en un comunicado, el Jefe de Estado hizo los moldes para un juego de plantillas que usará con el calzado, otro para una rodillera que utilizará para la práctica de deportes y le hicieron una infiltración en la zona operada que sigue los parámetros habituales de quienes se realizan ese tipo de intervención.
El pasado jueves Macri también se había realizado una serie de estudios en el mismo centro de salud con igual fin.
Según se informó oficialmente, el jefe de Estado se hizo "una serie de estudios que fueron ordenados oportunamente por el médico Jorge Batista, tras la artroscopia que le realizó", en su rodilla derecha. Se trató en esa ocasión de una resonancia y placas radiográficas de la rodilla derecha, según se informó.
El pasado 23 de junio, el mandatario fue operado por el traumatólogo Batista, en la Clínica Agote, por una esguince que se lo originó a mediados de junio mientras jugaba al paddle en la Quinta de Olivos. Ante la molestia que sintió Batista lo revisó y diagnosticó que se trataba de un esguince y dispuso la intervención.
En aquella oportunidad el médico presidencial Simón Salzberg señaló que "había un pedacito de menisco suelto en la rodilla" que se le extirpó en la intervención, y así "se le sacó lo que le causaba dolor".
El mandatario finalmente se recuperó tras una rehabilitación "corta e intensa en los primeros días", en cumplimiento de la disposición médica.
El Presidente tuvo varias visitas a revisiones de profesionales de la salud en sus ocho meses de gestión: a comienzos de año se había realizado estudios de rutina en la Fundación Favaloro; después se atendió dos veces en la Clínica Bessone de Malvinas Argentinas, una en el Hospital Juan A. Fernández y otra en la Favaloro por la fisura de costilla; mientras que luego fue derivado a la Clínica Olivos por la detección de una arritmia cardíaca.