Con la presencia de Darío Nieto -un exsecretario de Mauricio Macri- en el estudio, lo que marca una declaración de principios, Eduardo Feinmann le contó las costillas a Javier Milei y lo dejó expuesto.

Si bien podría haber tratado de minimizar el escándalo o, como hizo su enemigo íntimo Jonatan Viale, intentar “ayudar”, Feinmann fue por otro camino.

Lejos de tratar de tapar la estafa, mostró cómo habían sido las dos veces anteriores en las que Javier Milei realizó la misma operación de promocionar una cripto moneda desconocida para que suba su precio y luego, tras el rug pull, obtener una cuantiosa ganancia.