En el 2016 varias escuelas porteñas no tendrán un edificio donde funcionar
A partir de la plena implementación de la Nueva Educación Secundaria (NES), prevista para al año próximo, "muchas escuelas públicas" de la Ciudad de Buenos Aires "se van a quedar sin edificio porque el Gobierno porteño no construyó nuevos establecimientos" para albergar a aquellas instituciones que comparten inmueble en diferentes turnos, denunciaron docentes, padres y alumnos.
La NES supone una transformación integral de la enseñanza media para modernizarla y hacerla más equitativa, acordada por el Consejo Federal de Educación y en el marco de la Ley de Educación Nacional sancionada en 2009, e incluye un incremento de la carga horaria, algo para lo que la infraestructura escolar porteña actual no está preparada.
"Al haber más horas de cursada, los chicos del turno mañana, que ahora tienen hasta sexta hora, se tendrán que quedar hasta séptima y octava: en vez de salir 12,30 van a hacerlo a las 14, pero a las 13 ahora ya entra el otro turno", explicó a Télam Rubén Berguier, secretario gremial de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE).
Según el gremialista, "por lo menos el 30 por ciento de los edificios tienen más de dos escuelas y serias dificultades para implementación de la NES".
"El gobierno no construyó nuevas escuelas para implementarla y ahora hay algunas que se van a quedar sin edificio: nuestro sindicato advirtió desde hace tiempo que esto requería una planificación, que no existió", aseguró, por su parte, la secretaria pedagógica del sindicato Ademys, Susana Colli.
Uno de los casos más paradigmáticos es el del Comercial N°4 "Baldomero Fernández Moreno" del barrio de San Telmo, cuyos estudiantes y docentes se manifestaron esta semana cortando cuatro carriles de la Avenida San Juan para reclamar un edificio adecuado ubicado en el mismo barrio donde seguir funcionando el año próximo.
"A principios de año nos convocaron del Ministerio de Educación porteño y nos dijeron que para el ciclo 2016 nos tenemos que buscar nosotros un nuevo edificio porque, por la NES, no da el espacio físico para los nuevos talleres y horarios: ¿Cómo vamos a ofrecer nosotros nuestras vacantes si no sabemos ni siquiera dónde vamos a estar?", aseguró la preceptora Karina Masotta.
En el viejo edificio de Bolívar 1235 conviven el Normal N°2 "Bernardino Rivadavia", que funciona en el turno mañana, el Comercial N°4 y el Comercial N°27 "Antártida Argentina", que dicta clases de noche.
El problema de espacio ya se había vuelto crítico a principios de este año, cuando el Normal N°3 "Bernardino Rivadavia" se transformó en un establecimiento de jornada completa, a expensas del Comercial N°4, que pasó de ocupar la planta baja, el primer piso y una parte del segundo; a concentrase sólo en estos dos últimos niveles y ya sin acceso al patio.
"Este año nos encontramos con que tenemos mucha menos disponibilidad del espacio físico del edificio que ocupamos hace 80 años, por una medida que nos deja a nosotros con mucho menos espacio del que teníamos y con la misma matrícula", explicó la docente y delegada de Ademys en el establecimiento, Adriana Betucci.
"Los chicos ahora no tenemos un patio donde recrearnos y aulas muy chicas donde en verano nos morimos de calor porque los ventiladores no andan y no hay ni cortinas", afirmó Carla Pistón, estudiante de cuarto año y presidenta del centro de estudiantes.
El problema se hizo más evidente cuando se iniciaron las gestiones para la adopción de la NES porque "los chicos tienen que estar más horas en el colegio y no tenemos más espacio físico donde ponerlos", aseguró Bettucci.
La comunidad educativa del Comercial 4 está muy preocupada porque, aunque informalmente, en una de las reuniones se habló de trasladar el colegio al barrio de Palermo y también circuló otro rumor de que iría a parar al Polo Educativo de Lugano.
Docentes y alumnos defendieron la permanencia en el barrio de la escuela, porque "es el único comercial de turno tarde en 10 cuadras a la redonda" y porque "asisten muchos chicos en situación vulnerable que no podrían viajar más lejos".
Problemas similares de falta de espacio padece la Escuela de Enseñanza Media N°4 Homero Manzi del barrio de Pompeya cuyas escasas 13 aulas funcionan en la ex sede de la Universidad Tecnológica Nacional, que abandonó el inmueble por obsoleto hace más de 12 años.
"Estamos habilitados como escuela pero no tenemos salida de emergencia, no tenemos calefacción, ni taparrollos y un solo ascensor con capacidad máxima de tres personas para abastecer las necesidades de 700 pibes y 20 docentes repartidos en 4 pisos", dijo Paula Leoz, preceptora y delegada de UTE en el colegio que lo definió como "una caja de zapatos".
"Lo que estamos reclamando es que nos den el predio que el ministerio tiene en Andrés Ferreyra y Avenida Almafuerte, que lo están usando como depósito, porque con la NES, además, aumentan las horas cátedra y se nos van a superponer los turnos mañana y tarde", contó.
Otro caso es el del Centro Educativo de Nivel Secunario para adultos (CENS) N° 27, que funciona por las noches en la casona de Avenida Entre Ríos 757, que durante el día ocupa la Escuela Comercial N°5 "José de San Martín".
"Es el único CENS de la zona, pero la dirección del área de media exige mayor espacio para implementar la NES en el Comercial 5, dejando sin edificio al secundario de adultos que está en el turno siguiente: esto desnuda la problemática que trae aparejado un cambio que se quiere implementar sin prepuesto para nuevos edificios, ampliaciones y mayor carga horaria de los docentes", agregó Colli, quien además es vocal electa en la Junta de Clasificación docente para los CENS.