Tras la fallida denuncia del fallecido fiscal Alberto Nisman, el periodista del Buenos Aires Herald, Damián Pachter, el primero en anunciar la muerte, aseguró sentirse amenazado y por eso decidió abandonar el país.

En este sentido, legisladora porteña Gabriela Cerruti visitó 678, junto al subeditor de Página 12, Sebastián Abrevaya, donde expresó: “Creo que se empezó a caer la operación de la denuncia, que nos estábamos quedando sin tapa del domingo, y de repente apareció esta otra operación para seguir sosteniendo un tema que se está cayendo a pedazos”.

“Él dice que desbarató la operación, y Clarín agregó que la operación era del Gobierno”, indicó la legisladora en relación a los dichos del periodista ‘exiliado’, mientras que sobre el caso del fiscal fallecido, expresó: “Lo serio, y grave, es la muerte de Nisman, y hay que saber qué pasó y por qué le hicieron presentar esa denuncia, que no es una denuncia y que dudamos si fue escrita por él”.

Por su parte, Cerruti consideró que “este es el ataque político más fuerte a la Presidenta en estos 10 años”, ya que entiende “que es la intención de tirarle un muerto político a Cristina, con la denuncia y el periodista que se escapa”, al tiempo que sostuvo: “Estamos frente a un hecho de muchísima gravedad, donde ni siquiera la oposición está a la altura de lo que está sucediendo”.

“Está claro que en esa denuncia no hay absolutamente nada, y que esa denuncia era para que el título de la muerte de Nisman fuera ‘murió el fiscal que estaba por denunciar a la Presidenta’”, manifestó la invitada de 678.

Por otro lado, el subeditor de política de Página 12, Sebastián Abrevaya, se refirió al supuesto exilio de Pachter, y remarcó: “Cuando uno lee la información que da desde Israel, tampoco es muy claro con respecto a las amenazas que sufrió; habla de una persona sospechosa, con anteojos oscuros y jean, que en principio podría ser un agente de inteligencia, como podría no serlo”.

“Lamento que no esté en Argentina, que no haya recurrido al Estado argentino para su seguridad, si es que tenía miedo”, reconoció el periodista, al tiempo que explicó que su colega fue el primero que se enteró de la muerte de Nisman, y reveló: “Tuvo una información que no sabemos de dónde vino, y no podemos inferir de dónde lo sacó”.