Polémica en China por la técnica artística llamada ''caligrafía vaginal''
Un pintor chino es acusado por la Asociación de Artistas de China de "sexualizar" la técnica tan popular en aquel país, volviéndola vulgar y "degradante". Las performers utilizan una especie de brocha-consolador.
La Asociación de Artistas Chinos expulsó al pintor Sun Ping, por considerar que el tipo de performance que realiza resulta "degradante" y vuelve vulgar la técnica milenaria de la caligrafía china, un arte popular que se puede apreciar en las calles del país.
Graduado en la Academia de Bellas Artes de Guadong, Sun Ping se afilió a la Asociación en 1985, y desde 2006 impulsa a sus performers para perfeccionar esta singular manera de pintar: sus "caligrafías vaginales" son realmente impresionantes por la manera en que las mujeres deslizan las brochas con sus músculos vaginales, sobre cartulinas colocadas en el suelo. Sí, en realidad, las artistas son ellas.
La AAC emitió un comunicado condenando al pintor de 63 años por "sexualizar la caligrafía", afirmando que su arte era vulgar y "degradante para la caligrafía en sí misma" y también para "la prístina reputación" de la entidad.
Sung Ping necesitó ponerle sexualidad a su arte desde su juventud: en sus años con el Ejército, su obra "sueños húmedos" -exhibía sábanas manchadas de semen- levantó mucha polémica, aunque él intentaba transmitir "la frustración del espíritu".
"Nuestra cultura nos impregna con los tabúes sexuales. Si el arte es venerado, ¿por qué no puede ser reverenciado el sexo del mismo modo? Las personas que miran mi obra con una perspectiva que no es más que sexual, criticarán inmediatamente y se perderán su significado más profundo", explicó Ping.
"Una vagina es considerada vulgar por algunos, pero es de donde todos provenimos", sostuvo en declaraciones al sitio Sixth Tone.