Algunos dirán que está indignada pero en realidad parece que Yanina Latorre está muerta de envidia porque Pampita habría arreglado un pago de 30 mil dólares para ir a lo de Susana Giménez donde solo le pidió a la diva que no trate a su ex de “estúpido”.

La señora, que aseguró tener la primicia del nuevo romance de Pampita y que adelantó una presentación formal que nunca sucedió, ahora no sale de su asombro porque hay gente a la que le pagan por hablar.

Lo cierto es que Pampita arregló un dinero por ir a hablar de ella, claramente sin comprometerse a nada y Yanina confesó que ella hubiera ido gratis. La diferencia, claro, es que a nadie le importa lo que Yanina tenga para decir.