El central, uno de los primeros refuerzos que trajo Boca tras la salida de Juan Forlín, sufrió una molestia en el aductor izquierdo y podría estar desgarrado de nuevo.

Vale aclarar que ya desde un principio no había pasado la revisación médica y se sabía que no estaba para jugar. Cuando pudo recuperarse de esa primera lesión, se desgarró y, ahora, después de volver a entrenarse a la par del grupo durante algunos días, sufrió una molestia en el aductor izquierdo.

Por lo pronto, se someterá a estudios para saber el grado de lo que tiene y poder definir cuándo podrá entrenarse con normalidad con sus compañeros. Mientras tanto, su debut deberá esperar.