Batalla campal en el clásico de Río Negro luego de dos expulsiones
Deportivo Roca, líder de su Grupo en el Torneo Federal A, perdía en su cancha ante Cipolletti por 1 a 0. El árbitro expulsó a un jugador de cada lado, que se quisieron pelear. Eso desató la locura dentro y fuera del campo. El saldo: un jugador al hospital con fracturas en su pierna y 12 expulsados.
Marcos Lamolla, de Cipolletti, y Fernando Fernández, de Roca, se cruzaron y el juez Fernando Espinosa los expulsó.
Iban 22 del segundo tiempo, Cipolletti ya ganaba 1 a 0 el clásico.
Lamolla -el defensor que rechazó la pelota-, no toleró la roja y reaccionó. Cuando fue a buscar a su rival, el resto de los futbolistas intervino y terminó en una batalla campal.
Un medio rionegrino escribió en su crónica: "El juez del partido y sus asistentes increíblemente corrieron hacia los vestuarios sin siquiera ver lo que sucedía. La policía rápidamente tomó intervención y de a poco la batahola fue cesando".
El saldo: Nicolás Alegría, jugador de Cipolletti, fue retirado en ambulancia bajo una lluvia de piedrazos, con una pierna fracturada y totalmente inconsciente por los golpes recibidos. Para colmo, el ánimo en las tribunas, que ya venía caldeado, se tornaba insostenible y caían proyectiles al campo de juego.
El informe final del árbitro Espinosa consignó seis jugadores informados por ambos bandos, lo que haría imposible la continuidad del juego. Habrá que esperar ahora la resolución del Consejo Federal, aunque el reglamento indica que debería darse por perdido el encuentro a ambos clubes.