Las cartas de dos intelectuales que buscaban sobrevivir al nazismo
Fragmentos y anotaciones de un intercambio epistolar entre los dos académicos (durante los años 1935- 1937) que se vieron obligados al exilio ante el avance xenófobo y la imposibilidad de un pensamiento "libre".
El nuevo libro publicado en la colección "Exhumaciones" de Ediciones Godot nos ofrece una edición que no sólo está pensada para académicos o estudiosos sino que permite, para un público más amplio, comprender la relevancia de ambos intelectuales en una convulsionada historia que se narra a través de una letra íntima.
"Mi esposa acaba de descubrir su artículo en el Nuevo periódico de Zurich del último sábado. ¡Qué alegría! Que usted esté todavía allí. que usted escriba y con tonos desaparecidos de nuestra patria" es lo que puede leerse en la primera carta (1935) escrita por Erich Auberbach a Walter Benjamin en este libro que cuenta con la traducción y estudio preliminar del Dr en Literatura Raúl Rodríguez Freire.
La edición incluye cuatro materiales; el primero, las cinco cartas entre ambos intelectuales (cuatro de Auerbach, una de Benjamin) que no sólo están unidos por su ciudad natal sino también por intereses comunes como afrontar el exilio, las lecturas (Marcel Proust), el intercambio de escritos y contactos con colegas (que incluyen devolución de gentilezas) y el lenguaje que parece estar en plena transformación poniendo en jaque la filología románica.
El segundo, una introducción en la que se contextualiza cómo en 1935, con el séptimo congreso anual del Partido Nacional Socialista Alemán de los Trabajadores, se asentaban las leyes que "legitimaron la exclusión de los judíos de cualquier posición e injerencia sobre la educación y la cultura alemana" afectando a ambos profesores y académicos berlineses.
Tercero, un artículo de Werner Krauss (discípulo de Auerbach que narra cómo lo instaron a darle la espalda a su maestro, cosa que no hizo y que le valió una condena a muerte de la que logró escapar por un bombardeo) sobre las condiciones de la Universidad de Marburgo. Casa de estudios de la que Auerbach fue apartado por su condición "no aria" y que servía como caja de financiamiento para los nazis.
En cuarto lugar un pequeño epílogo dedicado a "la política de Auerbach" una figura no tan conocida como sí lo es el autor de "Los Pasajes" y la noción del aquí y ahora aurático. Es el propio Rodríguez Freire el que reconoce que la existencia de dicha correspondencia llegó a él a partir de su lectura de la obra de Roberto Bolaño (Los detectives salvajes y su discontinuidad de la historia).
Rodríguez Freire aporta notas a las cartas tomando sus originales y las diversas traducciones que contribuyen a esclarecer el pensamiento académico que se escurre entre las breves líneas epistolares, anotaciones (incluídas las banales como un listado de almacén) y algunas palabras enigmáticas.
Freire señala que Auerbach "había aprendido de la literatura que la libertad es también una de las formas de la política". Historicismo auerbachiano y alegoría benjaminiana que recorren estas cartas que forman parte no sólo de los estudios sociales sino de la propia historia.
Correspondencia Erich Auerbach- Walter Benjamin
Traducción y estudio preliminar Raúl Rodríguez Freire
Colección Exhumaciones, Ediciones Godot
1ra edición, julio 2015
96 p.