Ocurrió en un centro comercial en China, donde una mujer que se disponía a bajar por las escaleras mecánicas con el cochecito y su bebé, algo que está estrictamente prohibido, no calculó bien la posición y este comenzó a rodar cuesta abajo.

El pequeño debió recibir atención médica, aunque no trascendió la gravedad de sus heridas ni su estado actual.