Un vídeo grabado por un testigo del hecho, deja al descubierto la manera brutal en que dos agentes de seguridad de Nueva York forcejean con una mujer para quitarle a su bebé de un año antes de arrestarla, lo que desató e repudio generalizado en las redes y el enojo del propio alcalde Bill de Blasio, que lo calificó de "perturbador".

Jazmine Headley, de 23 años, fue detenida cuando se encontraba en la Oficina de Recursos Humanos del distrito de Brooklyn por "resistir el arresto, actuar de manera perjudicial para un nene, obstruir la administración gubernamental y entrar en lugar sin autorización".

Una testigo Nyashia Ferguson, relató que Jazmine acudió con su bebé a un centro asistencial del barrio de Boerum Hill para recibir los tickets de comida y llevaba esperando al menos dos horas.

Como todas las sillas estaban ocupadas, se sentó en el suelo y una guardia de seguridad le ordenó que se levantara y que no podía esta ahí porque entorpecía el paso.Según su versión, los oficiales se reían de ellas y luego de una discusión, comenzó el brutal y vergonzoso despliegue policial.

El presidente del condado de Brooklyn, Eric Adams, solicitó que se retiren los cargos contra Headley, sin embargo, la Fiscalía aseguró que la joven madre no se encuentra detenida por este incidente, sino porque existe una orden judicial del estado de Nueva Jersey.

El fiscal del distrito de Brooklyn, Eric Gonzalez, señaló que están intentando comunicarse con el estado de Nueva Jersey para "acelerar su liberación".

"Al igual que cualquiera que haya visto el vídeo, tengo muchas preguntas sobre cómo ha sido manejado el incidente. La policía de Nueva York y la Oficina de Recursos Humanos llegarán hasta el final de lo sucedido", dijo en su página oficial de Twitter.

La Defensora del Pueblo de la ciudad de Nueva York, Letitia James, también denunció lo ocurrido y aseguró que "ser pobre no es un crimen". "Las acciones de la policía en el video son espantosas y despreciables", dijo James y pidió la apertura inmediata de una investigación.

Según los medios locales, dos agentes de la Oficina de Recursos Humanos implicados en el arresto fueron "asignados a otros deberes" mientras se investiga lo sucedido.

Fuente: Crónica