"Es totalmente legítimo, en el marco de los acuerdos entre el gobierno nacional y las provincias aliadas, que se dé el apoyo mutuo que puede derivar en el acompañamiento de iniciativas del oficialismo en el Congreso", afirmó Pichetto en un comunicado.

Además, remarcó que ese respaldo "no implica ningún tipo de presión o método coactivo" ni conlleva a "ningún método espurio sino que forma parte de la acción política derivada de acuerdos institucionales entre el gobierno y algunas provincias".

"Es parte de la gestión de gobierno y no tiene nada de coactivo ni de dádiva, ni de presión", insistió el senador en referencia a las críticas del radicalismo y a las denuncias sobre una presunta "compra" de votos en la Cámara alta para la aprobación de proyectos oficiales.

Reseñó que el bloque oficialista defendió la política nacional "en un marco de coherencia, de cara a la sociedad y dando todos los debates".

"Valoro la política y el diálogo con los senadores y jamás utilicé ningún mecanismo de presión con nadie para que vote una ley", concluyó Pichetto.