Según la esposa de Castillo, él disparó a la policía al creer que eran ladrones
“Lo único que hizo fue defender a su familia porque creía que eran ladrones”, indicó Natalia Luengo, esposa del titular de la feria ‘La Salada’.
Como se sabe, el titular de la feria ‘La Salada, Jorge Castillo, fue detenido en su casa de Open Door en el marco de un megaoperativo que concluyó con la aprehensión de otras 30 personas. Según fuentes de la causa, se resistió a los tiros e hirió a un efectivo policial.
Su esposa, Natalia Luengo, afirmó que al momento de efectuar disparos con una escopeta, su marido intentó defenderse de lo que creyó era un asalto a su propiedad, considerando que los policías de la Bonaerense no se habrían identificado.
La mujer sostuvo que su esposo “no es un delincuente, es una persona trabajadora, y lo único que hizo fue defender a su familia porque creía que eran ladrones” las personas que intentaban realizar el allanamiento.
“Estoy indignada por la cantidad de mentiras que dicen en los medios y por cómo actuó la Justicia. Fue algo indignante y que ahora lo acusen de tentativa de homicidio…”, se quejó Luengo por radio AM 1300.
La esposa de Castillo aseguró que alrededor de las 23.50 se encontraba durmiendo con su marido y sus hijos de de 6, 8 y 9 años en la planta alta de la propiedad, situada en el Haras Argentino, de la localidad bonaerense de Open Door, Partido de Luján.
“Escuchamos una explosión y como unas corridas, tenemos una puerta blindada y escuchábamos como que la golpeaban. Lo primero que pensamos es que eran ladrones. Nunca se presentaron, reventaron puertas sin decir nada, no es que dijeron ‘policía’ o ‘allanamiento’ para que los identificara”, relató la mujer.
Agregó que entonces su marido bajó, se acercó a la puerta y les dijo “'córranse porque disparo’ y lo hizo por la mirilla. Fue como para hacer ruido, no es que se defendió a los tiros de la detención, no estamos en el Lejano Oeste, no es un animal, porque siempre estuvo a derecho”, dijo.
La mujer afirmó que todo esto quedó registrado porque ella había llamado al 911 para decirles que estaban entrando a robar a su casa y recordó que en una ocasión sufrieron un robo con un grupo comando que los ató con precintos.
La esposa de Castillo aseguró que después los policías le gritaron a su marido que no disparara y se identificaron como tales, él abrió la puerta y todos se reunieron en el living, pero los chicos estaban con una “crisis” por lo sucedido.
Poco después, dijo que le mostraron la orden de detención a su marido, lo arrestaron y la Policía “revisó todo respetuosamente”. Pero “primero te meten preso y después te investigan”, se quejó la esposa de Castillo, calificando el operativo como “un circo, una paparruchada”.