Esta vez Ricardo Canaletti parece tener razón. El fiscal de la causa Loan no está a la altura de lo que está investigando o directamente es “un salame”.

El hombre se mantuvo impávido y sin hacer su trabajo durante los primeros ocho días y después se mostró sorprendido por el accionar de la policía.

El periodista especialista en policiales le tuvo que explicar al fiscal cual es la participación de cada uno de los actores de esta causa y sus antecedentes. En realidad el calificativo de salame, si bien le cabe al fiscal lo exculpa de haber sido partícipe por acción u omisión.