Afiliados agrupados bajo la línea opositora intentaron tomar la sede del sindicato de Empleados de Comercio este lunes, cuando vencían los mandatos y debían asumir las nuevas autoridades: en realidad, el secretario general Armando Cavalieri renovó su permanencia al frente del gremio en las elecciones de septiembre pasado -lleva más de 30 años como titular- pero desde el sector que conduce Ramón Muerza denuncian irregularidades en el proceso de sufragio.

Los trabajadores intentaron ingresar a la sede en la calle Moreno al 600 y hubo destrozos como resultado de la acción policial, que para dispersar la protesta lanzó gases lacrimógenos. Según iprofesional.com, un grupo de afiliados habría intentado tomar el edificio cuando fueron atacados desde un edificio lindero con "gas pimienta y piedras".

Muerza en la previa a la represión. Foto: eEmiliano Lasalvia (La Nación)
Muerza en la previa a la represión. Foto: eEmiliano Lasalvia (La Nación)

Mientras el resultado de la elección fue confirmado por autoridades de la secretaría de Trabajo, el sector que conduce Muerza denuncia que habrían sido empadronados 5400 empleados muertos. Para la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo, Cavalieri ganó por el 50% de los votos, pero Muerza afirma haber sido el vencedor por un puñado de votos.

Muerza, delegado de los trabajadores de Coto, perdió por una diferencia muy corta: apenas 461 votos, entre los 11051 de Cavalieri y sus 10590, según informó La Nación. El resultado final aún está bajo disputa judicial.