El cónsul general de Paraguay en Buenos Aires, Héctor Figueredo, presentó su renuncia luego de ser denunciado por acoso sexual contra una joven de su país residente en Argentina, que reveló los mensajes fuera de lugar recibidos por el funcionario.

El Ministerio de Exteriores de Paraguay solicitó el miércoles la renuncia de Figueredo, que fue realizada horas después, según informó la prensa local.

Ana Grissetti, de 24 años, denunció en sus redes sociales que Figueredo le invitó este martes a pasar la noche con él, tras acudir a la embajada paraguaya en Argentina para preparar un evento, según detalló en su cuenta de Facebook.

"Misógino", así calificó al cónsul paraguayo al comenzar su texto de denuncia en las redes sociales y agregó: "Ayer asistí a la embajada de Paraguay en la ciudad de Buenos Aires con el fin de coordinar detalles de un encuentro juvenil, que estamos organizando con un grupo de jóvenes comprometidos con el bien social. Grande fue mi sorpresa cuando tras conocer al señor Héctor Figueredo recibí la invitación por parte suya de pasar la noche con él".

La joven afirmó sentirse "denigrada" por la "total falta de respeto" de Figueredo hacia ella y "hacia todas las mujeres", a quienes cree que "puede poseer a su voluntad, haciendo uso de su nombramiento para satisfacer sus perversiones".

La víctima añadió que "pese al enorme malestar que estoy sufriendo decido hacer esto público porque quiero advertir a todos el tipo de manejos que tiene esta persona".

En una publicación posterior, la mujer se reafirmó en su acusación y aseguró que no se retractaría ni eliminaría la primera publicación "pese a quien le pese" y "aunque esto me afecte a nivel personal y jamás me vuelvan a abrir las puertas institucionales".

Reiteró luego: "Esta situación me pone en un lugar muy incómodo, que causa vergüenza e indignación. No voy a detenerme aunque me cierren las puertas".

Figueredo es miembro del Partido Colorado y su nombramiento en diciembre había causado polémica, ya que no cuenta con carrera diplomática previa para un puesto de alta importancia para Asunción como lo es la capital argentina. Incluso, tras ser nombrado reconoció que no sabía cuáles serían sus funciones.

Se trata del segundo cargo del Gobierno de Mario Abdo Benítez instado a renunciar tras haber sido denunciado por acoso sexual, después de que en octubre pasado, el entonces director de Migraciones, Julián Vega, fue denunciado por tocar una pierna a una traductora taiwanesa durante el viaje oficial del presidente a Taiwán.

Vega fue instado a dejar su cargo por parte del Ministerio del Interior y obligado a volver a Paraguay antes de que finalizase la visita oficial.