Este destacado punto turístico de la provincia de Buenos Aires atrae a miles de personas que desean disfrutar del mar y sus playas. Sus amplias costas se complementan con un vibrante turismo que se nutre de su patrimonio histórico y su variedad de propuestas culturales, ofreciendo así opciones para realizar una escapada durante todo el año.

Además, la localidad cuenta con una próspera zona céntrica, donde los visitantes pueden disfrutar de sus comercios, restaurantes y alojamientos.

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Se trata de la localidad de Tres Arroyos, ideal para escapar del ritmo de las grandes ciudades y relajarse frente al mar en un ambiente tranquilo, alejado de las multitudes y el bullicio. El sitio contiene numerrosas instalaciones céntiricas que cuentan con novedades durante todas las temporadas y sus instalaciones permiten un gran descanso.

Qué hacer en Tres Arroyos

El sitio más emblemático de la región es Claromecó, donde se da una única unión entre el arroyo Claromecó y el mar, generando un ambiente rico en biodiversidad. Este lugar ofrece también la atracción de las Siete Cascadas y el imponente Faro Claromecó, uno de los más altos de Sudamérica, que se ha convertido en una visita casi obligatoria. Además, Claromecó es un destino perfecto para la pesca deportiva.

Entre los puntos históricos, destaca el Salto de Christian, que narra la leyenda de Christian Madsen, un prisionero fugado que, tras escapar de un barco, se convirtió en pescador y en figura legendaria. Su historia no solo inspiró a la comunidad de Tres Arroyos, sino que también fue llevada al cine en 2007 por el director Eduardo Calcagno en la película El salto de Christian.

Otra atracción destacada es el Molino Holandés, que rinde homenaje a los primeros inmigrantes, especialmente de origen neerlandés y danés, que llegaron a la región entre mediados del siglo XIX y principios del siglo XX. Su arquitectura llamativa lo convierte en un sitio turístico especial.

Además, Tres Arroyos está rodeada de pintorescos pueblos costeros, como Orense, que cuenta con el balneario “Punta Desnudez,” llamado así por la naturaleza casi virgen de sus playas. También está la localidad de Reta, que, con menos de mil habitantes, ofrece playas tranquilas y un ambiente sereno.