La reforma que regirá desde el 2015 incluye un cambio en las escalas de calificación que irán desde el 4 hasta el 10, es decir se eliminaría los aplazos 1,2,3, aunque la aprobación de las materias seguirá requiriendo llegar al 7.

Además, desde cuarto grado se podrá pasar de nivel si el alumno tiene todas las materias promocionadas salvo una: en ese caso cursará quinto grado adeudando la materia que deberá compensar con la ayuda un tutor especial.

"Acá no es que no van a existir los aplazos. Lo que hace es que si un chico funcionó en todas las áreas menos una, por ejemplo, lo que hace ese chico no es promover el año sino pasar y tener desde el primer día de clases de marzo un maestro especial durante el tiempo que lo necesite hasta que incorpore todos los aprendizajes", explicó la directora general de Cultura y Educación de Buenos Aires, Nora De Lucía.

"Antes si un chico tuvo un 1, un 1 y un 1 en los trimestres después, en una semana de compensación, terminaba aprobando sin respetar si aprendió o no", resaltó De Lucía.

La funcionaria bonaerense también advirtió sobre las acusaciones infundadas desde sectores opositores: "Massa está haciendo demagogia con este tema. Sería bueno que se entere de estas cuestiones porque se vienen trabajando desde el 2009".

"La norma no está iluminada en la idea de que todos terminen de cualquier manera", aclaró el ministro de Educación de la nación, Alberto Sileoni, al tiempo que envió un mensaje a los estudiantes alcanzados por las modificaciones: "Queremos que aprendas, que tengas más chances, que sepas que no va a sonar una chicharra que te diga no tenés más tiempo".

El Consejo General de Educación que votó los cambios examinó exhaustivamente la iniciativa. Se trata de un cuerpo colegiado compuesto por 10 miembros: seis representantes de políticos partidarios, con dos opositores, uno del massismo y otro del FAP; y cuatro de origen docente elegido por voto secreto de los maestros. Todos emitieron un dictamen no vinculante pero obligatorio a favor de la reforma.