Macri contactó a un cura católico para exorcizar la Quinta de Olivos
El sacerdote platense Carlos Mancuso reveló que fue contactado por el gobierno para exorcizar la residencia presidencial, pero señaló que el presidente Mauricio Macri finalmente optó por encargar esa tarea a budistas.
Carlos Mancuso contó que a fines de diciembre recibió un llamado en su domicilio, en La Plata, de "una señora de apellido Gómez" que se presentó como representante del presidente para encargarle una "limpieza" espiritual en la residencia presidencial.
El contacto se dio en los últimos días de diciembre, aunque finalmente, Macri optó por encargar esa tarea a budistas, según informó el diario Buenos Aires Herald.
El Presidente sospechaba que la exmandataria Cristina Kirchner dejó instalada una mala energía, y hasta ordenó una renovación en los despachos de la Casa Rosada.
El sacerdote platense afirmó que no sabía si se trataba de una "infestación" (un espíritu poseído que recorre los ambientes), una "obsesión demoníaca" (el demonio que persigue a una persona y le provoca malestar) o "un poseso" (el maligno que está dentro del ser humano), que de acuerdo con el catolicismo requieren terapias específicas cada uno.
“Por edad, presenté mi renuncia, pero con esta avalancha de fenómenos tenemos más trabajo ahora que cuando éramos párrocos”, aseveró Mancuso, y agregó: “Es una tarea oscura; son las fuerzas de espíritu maligno con las que uno tiene que vérselas”.
El religioso de 81 años recordó que tres días después del ofrecimiento, la misma mujer se comunicó para disculparse e informarle que el jefe de Estado había optado por un rito budista.
Mancuso atiende en el Hogar Sacerdotal de La Plata, en la calle 60 entre 27 y 28, y fue un cura regular durante 33 años en la parroquia San José de la capital bonaerense.
El sacerdote afirmó que ayuda a infectados de diferente signo, entre los cuales figura un exgobernador de la provincia de Buenos Aires, cuyo nombre no quiso revelar.