Luego del histórico debate que se dio en el Senado sobre el proyecto de ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, que fue rechazado por 38 senadores contra 31 a favor, desde el Episcopado Clerical hasta los colegios religiosos salieron a expresar su conformidad con el resultado. 

Así es el caso del colegio Calasanz de Caballito que envió una carta a las familias de los alumnos de dicho Instituto que es digno de estudio por la cantidad de frases retrógradas y vacío de contenido donde acusa a quienes buscaron la ampliación de derechos para las personas gestantes, a quienes calificó de "enemigo". 

También habló de que se estuvo en "un campo de batalla", y que el aborto "es abominable como la anticoncepción".