La policía detuvo a seis activistas de Ni Una Menos acusándolas de hacer pintadas

Como si fuera una amenaza, una muestra de 'quién es el jefe' pocas horas antes de un pronunciamiento mundial contra el abuso machista y las injusticias laborales de género, las fuerzas policiales coaccionaron con un grupo de varones que se hicieron pasar por oficiales y que demoraron a las activistas para que un operativo de tres patrulleros las detuviera de manera injusta.

Ni siquiera las sorprendieron cuando estaban realizando la actividad de difusión, la expresión ante el silencio y la complicidad de buena parte de la sociedad argentina frente a la problemática que se cobra la vida de una mujer cada 18 horas.

"Viva Cristo Rey", le gritaban los abusadores después de que las mujeres del colectivo Ni Una Menos pintaran convocatorias para la movilización de este miércoles, con el fin de retenerlas para su detención.

Por supuesto la Policía no actuó de la misma manera en que suele hacerlo cuando una mujer reclama contra un violento o cuando su acosador viola una medida perimetral: fue un operativo veloz y numeroso.

"Si bien fuimos liberadas, queda una causa abierta y vamos a pedir que se investigue el accionar policial, que detentó la fuerza de manera arbitraria e ilegal", dijo a Télam a minutos de su liberación Florencia Minici, detenida e integrante del movimiento #Niunamenos.

"En vez de protegerlas de ese grupo de varones que las insultaba y agredía, detuvo a las militantes en medio de un operativo desmedido y arbitrario", explicó la abogada de las víctimas, Sabrina Cartabia a radio Télam.