En el marco de la causa en la que se investiga el crimen de la joven Anahí Benítez, los investigadores hallaron pelos, manchas de sangre y ropa de mujer en la casilla del segundo sospechoso que fue detenido anoche.

El hombre que fue detenido estaba en una casilla lindera a la estación ferroviaria Santa Catalina, ubicada en el mismo predio donde se halló el cadáver. En ese lugar los perros rastreadores detectaron restos de alimentos iguales a los que los forenses descubrieron durante la autopsia en el organismo de la víctima.

Después de que la autopsia revelara que el cadáver de Benítez presentaba algunos golpes aunque no tenía rasgos de violencia sexual y se determinara que falleció por "asfixia por sofocación", la justicia dispuso la detención del profesor de matemática.  

Los informantes señalaron que con ayuda de perros entrenados se buscaron pistas en la vivienda y en el automóvil que usa el docente sin resultados positivos, aunque los investigadores se llevaron para analizar algunos escritos y la memoria de los aparatos de comunicación del profesor.