La historia de Israel Hernández conmovió a la comunidad latina en Miami y desembocó en protestas y movimientos en pos de conscientizar sobre la peligrosidad que representan estas armas que según las autoridades policiales son "no letales".

En 2013, el joven grafitero de 18 años fue perseguido por oficiales por estar pintando la pared de un local vacío, reducido y luego torturado por el oficial Jorge Mercado, en un claro hecho de abuso policial, de acuerdo a lo que contó el padre del joven en una entrevista con Radio Con Vos.

El joven estaba a punto de viajar a Nueva York donde había conseguido una beca de arte: por lo que era obvio que se trataba de un artista prometedor. El disparo en el pecho le terminó causando una insuficiencia cardíaca, y aquí se da una de las principales faltas en la utilización de este armamento eléctrico.

A raíz del caso, La Policía del condado Miami-Dade fue obligada a portar cámaras en sus uniformes para reducir los casos de abuso, mantener la transparencia y generar confianza y legitimidad con la comunidad. 

Según Amnistía Internacional, desde 2000 hasta 2017 se registraron poco más de 600 muertes en manos de estas pistolas eléctricas en Estados Unidos. “Las Taser no son para inmovilizar, son instrumentos de tortura que generan un gran dolor interno y tal como está demostrado con la muerte de mi hijo, es sumamente letal”, contó Israel Hernández, el papá de la víctima.

Según determinó la ONU, ningún agente puede utilizarlas si no hay amenazas inminentes y tampoco puede apuntar al pecho para inmovilizar. Tras el anuncio de la Ministra de Seguridad, Patricia Bullrich sobre la adquisición de 300 armas taser para comenzar a utilizar en el país, el CELS hizo un pedido de informes para conocer el diagnóstico, la normativa y las guías de actuaciones: todavía no se ha entregado esta información.

Los organismos internacionales realizaron una serie de estándares y recomendaciones (vía minutouno.com)

- Las Taser deben ser usadas exclusivamente en situaciones extremas, tal como cualquier otra arma. Es decir, cuando exista una amenaza real e inmediata para la vida. No se debe usar una Taser sin haber intentado evitar el uso de la fuerza antes, mediante una señal de alto o similar, o con una técnica de reducción verbal.

- El tiempo limitado para disparar una Taser es de cinco segundos. Si la descarga supera los 15 segundos el riesgo de muerte se eleva significativamente.

- La mayor parte de las muertes relacionadas con uso de Taser no ocurren en el momento de la descarga, sino más adelante a causa de paros cardíacos o golpes al caer. Su utilización requiere un procedimiento de revisión médica inmediata a las personas a las que se le aplica la descarga.

Hay casos en que las Tasers no pueden utilizarse bajo ninguna circunstancia como son:

-Embarazadas

-Personas con signos de intoxicación por alcohol o drogas

-Personas con padecimiento mental

-Personas ya arrestadas, esposadas o precintadas

-Personas que ya recibieron una descarga (no se pueden realizar dos descargas sobre la misma persona)

-Personas a las que también se les arrojó gas pimienta. La aplicación de una descarga eléctrica con Taser puede generar una combustión química capaz de causar la muerte a quien antes haya sido rociado/a con gas lacrimógeno o gas pimienta.

Informe legista dice que el impacto del arma Taser le causó la muerte al grafitero en Miami