Él quedó embarazado y pudieron cumplir el sueño de tener un hijo
Diane Rodríguez y Fernando Machado son una pareja trans que hace poco más de un año tuvieron un bebé. En octubre de 2015 escribió algo en Twitter: "Voy a ser mamá, mi novio Fernando Machado está embarazado de mí!".
Diane Rodríguez y Fernando Machado son una pareja y ambos son trans. Diane nació con genitales masculinos pero nunca se sintió varón. Fernando nació con genitales femeninos pero nunca se sintió mujer. Diane es ecuatoriana y es una activista reconocida en su país.
Diane es activista, madre, psicóloga y acaba de ser electa Asambleísta Nacional (el equivalente a un Diputado o un Senador nacional en Argentina) por Alianza País, el partido del presidente electo, Lenín Moreno. El 14 de mayo será la primera mujer transexual en llegar al Congreso en Ecuador.
"Me botaron de mi casa a los 16 años cuando expuse lo que me pasaba. Me dediqué a hacer trabajo sexual y casi pierdo el colegio. Mi madre me encontró luego en la calle, regresé a mi casa e intentó deshomosexualizarme, porque hasta ese entonces era un chico aparentemente gay. Me envió con los testigos de Jehová, con los Mormones y finalmente fui obligada a ir a la Iglesia Católica todos los días para curarme", contó.
Diane se fue de casa a los 17 años y empezó a trabajar en un hotel como varón mientras hacía su transición a mujer. La echaron, los demandó y así dio se convirtió en activista.
"Creo que la Ciencia aún no ha trabajado lo suficiente con respecto al tema de la transexualidad. Yo lo equiparo con la lobotomía: hubo un momento en que la respuesta terrorífica que se dio a lo desórdenes mentales fue hacer cirugías cerebrales y dejar a la persona desconectada del mundo. Para mi, extirpar los genitales como respuesta a las personas trans es lo mismo. Así yo me haga la vagina más hermosa del mundo o me den las mejores hormonas artificiales no voy a ser mujer biológica nunca, por más mentiras que me pueda decir a mí misma. Si yo hubiera pensado en esto antes es probable que no hubiese intervenido mi cuerpo y ni siquiera me hubiera puesto mamas", opina.
La decisión de no anular sus genitales le permitió pensar que adoptar o alquilar un vientre no era para ella la única forma de ser madre. "No sabía cómo iba a obtener el dinero para eso pero esas eran mis perspectivas de familia. Después conocí a Fernando por Facebook, el es venezolano, se tomó un bus y al poco tiempo vino a conocerme. El también tenía muchos deseos de ser padre".
"Un día, en 2015, yo estaba en Tegucigalpa dando una conferencia y me envió una foto del test casero y un mensaje en el que me decía que estaba embarazado. Yo entré en estado de shock, no sé qué dije en esa conferencia, pero entendí que todo mi deseo de ser madre se estaba convirtiendo en materia".