El Instituto Nacional de Cine y Artes Visuales (INCAA) pagó $ 300 mil la escultura del pato inflable que acompañó la 32da edición del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata, la cual se celebró en noviembre del año pasado.

La intervención "artística" se colocó sobre el tradicional monumento del lobo marino de la Rambla y permaneció en ese espacio desde el 17 de noviembre hasta el 26, según el informe difundido por TN Central.

Según la descripción oficial, la intervención buscó darle visibilidad al festival resignificando "este ícono de la cultura de nuestro país, renovándolo durante los días que dura el festival e incluyendo una estructura para que los visitantes puedan registrar fotos".

​Desde el INCAA, según informó TN, sostuvieron que se trató de un "buen precio, un precio de mercado e incluso un precio barato" y que lo realizó un prestigioso artista. 

Aquella vez no hubo hubo gala de clausura: al igual que muchas de las actividades paralelas previstas durante el festival, quedó suspendida en solidaridad con los familiares del submarino desaparecido.

La premiación se realizó en una sencilla ceremonia en el salón Dauphine del Hotel Provincial y Wajib, de la palestina Annemarie Jacir, fue la ganadora finalmente del Astor de Oro a mejor película.