En una clara jugada contra la lucha de los trabajadores de Aerolíneas Argentinas, el gobierno otorgó el permiso por 15 años a la low cost Flybondi para volar en 284 rutas nacionales e internacionales, incluyendo una que une Buenos Aires con las Islas Malvinas.

Según se publicó en el Boletín Oficial, el Ministerio de Transporte habilitó a la empresa aérea a explotar servicios regulares y no regulares internos e internacionales de transporte aéreo de pasajeros, carga y correo con aeronaves de gran porte, a lo largo de un período de 15 años.

Se trata de 28 tramos en Sudamérica y el resto para 39 ciudades de todo el país, incluyendo Puerto Argentino en las Malvinas aunque con la aclaración de que "estará sujeta al resultado de las consultas con las autoridades del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto".

Flybondi tiene un año para obtener el Certificado de Explotador de Servicios Aéreos (CESA) y deberá iniciar las operaciones dentro de los 180 días después de obtener el CESA.

El viernes pasado la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA) se sumó a los vecinos autoconvocados del Aeropuerto de El Palomar en una marcha en reclamo por el peligro que representa para la comunidad el funcionamiento comercial, por la flexibilización laboral que propone la firma e incluso el reconocimiento de la base militar como un sitio de memoria donde se cometieron crímenes de lesa humanidad.

Una vez dictada y acatada la conciliación obligatoria en la discusión salarial de los trabajadores de la aerolínea de bandera, el Gobierno comunica una medida que va en clara competencia contra la empresa nacional y que le otorga un beneficio a una empresa que no cumple convenios laborales, que prohíbe a sus empleados afiliarse a sindicatos, que cancela vuelos ante una mínima lluvia, que a lo largo del año no dejó de mostrar inconvenientes técnicos y que encima pretende facilitar el ingreso de pilotos extranjeros.