El arzobispo de La Plata, Héctor Aguer, escribió una polémica nota donde brindó su opinión de la "misa ricotera" del Indio en Olavarría. Y quién mejor que un religioso para hablar de "misa", aunque parece que esta no fue de su agrado.

"En Olavarría la dimensión pseudorreligiosa estuvo asegurada sobre todo por el perfil mesiánico del protagonista, que por razones diversas y personales administra cuidadosamente sus presentaciones, despertando así una gran expectativa en muchísima gente, la cual podría reconocerse como sus seguidores o discípulos”, expresó.

Además, dijo que juzga "muy improbable" que las emociones suscitadas en aquella excepcional turbamulta "procedieran de las palabras de las canciones, inconexas y carentes de poesía".

Para él, "brotaban más bien del ritmo que en el rock es siempre obsesivo, de los estímulos alcohólicos y narcóticos consumidos a destajo y de esa especie de paradojal comunión, casi ritual, que llevaba a cada uno a olvidarse de sí mismo y del que tenía a su lado".