La ANMAT investiga a las marcas que comercializan chocolates en nuestro país, que figuraron en el estudio de calidad alimentaria de 'Foodwatch', donde se alertó por la presencia de sustancias "potencialmente cancerígenas".

Se trata de sustancias que permanecen en el envoltorio, y que se obtienen a través de la refinación de petróleo. Cuando se pone en contacto con los alimentos pueden ser "altamente cancerígenas".

'Foodwatch' está integrada por Alemania, Francia y Holanda, y realizaron pruebas de laboratorio sobre 20 golosinas. El producto más complicado fueron las "barritas Kinder" de chocolate, de la empresa Ferrero. También los "Fioretto Nougat Minis" de Lindt y "Sun Rice Classic Schoko Happen" de la marca Rübezahl.

El organismo denunciante criticó también a la Federación Alemana de la Industria de Golosinasasociación a la que pertenecen Ferrero, Lindt y Rübezahl, pero esas empresas comunicaron oficialmente que "el consumo de chocolate contaminado con aceites minerales aromáticos es inofensivo".

A pesar de los pedidos de 'Foodwatch' para que retiren estos productos del mercado, el organismo alemán de la industria de las golosinas se negó, alegando que "no existe ninguna razón para que la población entre en pánico".

Ese estudio activó las alarmas de todo el mundo. Argentina, ahora se dispone a estudiar a las marcas sospechadas y ver si en los productos que llegan a nuestro país, se repite la historia.