Dramática situación por inundaciones en Tucumán, Salta y La Pampa: ya hay dos muertos
Distintas zonas del norte y centro del país vienen sufriendo las intensas lluvias desde hace 10 días, que provocaron serios daños materiales y hasta víctimas fatales.
Una mujer murió este lunes en la localidad salteña de Morillo, incrementando a dos el número de víctimas fatales en la provincia de Salta como consecuencia de las inundaciones que la azotan al igual que a La Pampa y Tucumán, donde la situación es caótica.
La víctima, cuya identidad no trascendió, vivía en una casa de adobe, y falleció luego que la construcción se derrumbara. El domingo había sido hallado el cuerpo sin vida de una mujer, en la quebrada del paraje Arenas, quien había intentado cruzar un río en la zona Alto Verde, cuando fue arrastrada por la corriente.
"Hace mucho tiempo que no vemos llover de este modo en la zona; el agua tiró abajo algunas casas enteras, y otras perdieron algunas habitaciones", señaló Héctor Ibarra, propietario de una radio de Morillo, en declaraciones al diario El Tribuno.
La situación más crítica por las inundaciones en la provincia se encontraba en los departamentos de Anta, San Martín, Rivadavia, Orán e Iruya.
El contexto también es dramático en la vecina provincia de Tucumán, donde ya son más de 5.000 personas las que permanecen evacuadas como consecuencia de las intensas lluvias.
De esta forma, se han producido inundaciones en distintos sectores de la provincia por el desborde de ríos, al punto que, por ejemplo, la localidad de La Madrid quedó bajo el agua. “Es la más golpeada”, indicó el gobernador Juan Manzur.
“Mucha gente fue evacuada y estamos coordinando acciones para seguir asistiendo a los más afectados", explicó Manzur, y aseguró que "la magnitud del problema es importante porque hay mucha agua y pueblos enteros están inundados".
Por otro lado, el intendente de Santa Rosa, Leandro Altolaguirre (UCR-Cambiemos) declaró este lunes el estado de "catástrofe climática" en la capital pampeana por las intensas precipitaciones registradas en la semana última, que superaron los 400 milímetros y dejaron cerca de 3.000 evacuados.
El temporal también produjo un número importante de autoevacuados, como así también el anegamiento de más de 700 viviendas, barrios aislados y calles intransitables.