Diego Maradona llegó a la Argentina hace pocas horas, y de forma inmediata se trasladó al Sanatorio Los Arcos donde se encuentra internado su padre, quien está en terapia intensiva y con graves problemas de salud.

Desde la puerta de la clínica el astro habló con los periodistas que se encontraban en el lugar esperando por sus palabras. No aceptó preguntas, aunque les dijo: “Les quiero agradecer por esta vigilia que están haciendo por mi viejo”.

Don Diego está en estado crítico y en coma inducido. Con 87 años, ya había estado internado el mes pasado por una infección urinaria, y esta vez se encuentra en el Sanatorio de los Arcos, de Palermo, víctima de severos problemas respiratorios y coronarios.

“Lo acabo de ver, tengo mucha confianza en Dios y en Francisquito, y sé que mi viejo, con la ayuda de ellos, va a salir”, aseguró el ‘Diez’, quien regresó este martes desde Dubái, y expresó: “Les quiero agradecer a los doctores que lo cuidan y lo miman”.

“Les pido a todos los argentinos que recen por mi viejo, el que me quiere, y el que no, que rece igual, porque está la vida de mi viejo pendiendo de un hilo”, solicitó Maradona, quien, por último, contó: “No le pude hablar, pero lo pude besar; todo lo que estuve pensando en todo este viaje”.