Desfiguró a su novia en un parador de Mar del Plata y ella lo divulgó
Estaban en una fiesta cuando el hombre la agarró del cuello, la arrastró hasta el estacionamiento y le propinó una tremenda golpiza que la dejó inconsciente. Ella lo escrachó en las redes sociales.
El hecho ocurrió el pasado miércoles, cuando Victoria Montenegro y su novio, Cristian "Pilo" Pilloti, ambos de 25 años, asistieron a una fiesta en un parador de la ciudad de Mar del Plata.
Según el relato de la joven, ella estaba bailando con unas amigas, cuando de repente apareció su novio y le gritó: "¿Así que bailás como una putita? No vas a bailar más, te voy a matar".
Luego, el relato de la joven es escalofriante: "Me arrastró entre la gente hasta el estacionamiento y me golpeó de una forma desmedida hasta dejarme inconsciente, provocándome fractura de tabique, fractura del hueso del globo ocular en 3 partes y cortes y hematomas en toda la cara y en distintas partes del cuerpo, dejándome internada durante tres días".
Lo poco que recuerda Victoria de ese momento, es estar en el suelo del estacionamiento siendo golpeada y gritarle al personal de seguridad del balneario para que la salven. Pero ellos le dijeron que no podían interceder.
Cuando despertó, afirma que estaba en el asiento del acompañante mientras su novio "Pilo" iba manejando y hablando por celular diciéndole a alguien: "Me mandé una cagada".
El hombre la dejó en la casa de un amigo de ella y parece que volvió a la fiesta, ya que algunos testigos afirman haberlo visto bailando con la camisa llena de sangre.
"Me enteré que anda diciendo que me caí del auto y me di la cara contra un poste. Tengo las marcas de sus dedos en el cuello, y heridas detrás de las orejas así que puedo comprobar que lo que está diciendo es mentira", dijo la joven.
Se creó un grupo de Facebook llamado "Ayuda y Escrache a Cristian Pilloti" donde se publicaron fotos del agresor y diferentes testimonios que afirman que tiene una hija y que hasta le pegó en varias oportunidades. Incluso se habla que no le envía el dinero requerido por la madre de la niña.