El ministro Julio de Vido y su esposa, Alessandra Minnicelli, fueron sobreseídos en la causa por supuesto enriquecimiento ilícito, que ya fue archivada. Así lo confirmó la Sala I de la Cámara, que rechazó el recurso de la Fiscalía Nacional de Investigaciones Administrativas (FIA), que ahora podría ir en queja ante la Casación para que revise el fallo por el que se dicta el sobreseimiento.

En su dictamen, los camaristas Jorge Ballestero, Eduardo Freiler y Eduardo Farah y Jorge Ballestero sostienen que la FIA se limitó a enumerar nuevamente los bienes declarados por los imputados y los actos jurídicos a través de los cuales dichos activos habrían ingresado a sus respectivos patrimonios, pero no reflexionó acerca de la verificación de un "enriquecimiento apreciable" que sostenga la hipótesis delictiva denunciada.

"Para mayor perplejidad", indican los camaristas, en la última parte de su presentación de la FIA "se sostuvo que no podía descartarse la configuración de un supuesto de negociaciones incompatibles con la función pública".

"Ello –según los camaristas–, además de resultar sorpresivo y notoriamente incongruente con el objeto procesal de esta causa, permite entrever el esfuerzo inoportuno del impugnante por velar su propia inactividad en el sumario, la cual se remonta a los albores de la investigación".

De Vido fue denunciado por la compra de una chacra de cuatro hectáreas en la localidad de Zárate mientras era funcionario público, pero en 2009 el entonces juez federal subrogante Octavio Aráoz de Lamadrid consideró justificado el incremento patrimonial y los sobreseyó.

Ahora, ese sobreseimiento queda confirmado con la decisión del máximo tribunal penal del país.