Con jefes así da gusto: le construyó una casa de verano a sus empleados para que "desconecten" un poco
El dueño de una panadería fueguina construyó una quinta en Puerto Madryn con habitaciones, jardín y pileta climatizada para él y sus empleados. El hombre les paga todo menos la comida y los deja "limpiar la cabeza" entre 10 y 12 días que no cuentan como vacaciones oficiales. Un genio.
"Es que me gusta ver a la gente contenta", afirma Emilio Sáez, a quienes sus empleados ya postulan como el mejor jefe de la Argentina. Y se lo ganó con creces.
El hombre es dueño de la panadería 'La Unión', y en 2012 con un sobrante de plata que tenía con su contador, decidió construir la casa en un terreno propio que tenía en Puerto Madryn.
"Nos va bien. No tenemos que echar a nadie ni pagar juicios. Así que se nos ocurrió construir la casa... la construimos para todos", expresó Emilio al diario La Nación.
"Nos gusta concentrarnos en el recurso humano. Hacíamos cosas similares desde hace tiempo. Al principio, cuando éramos 3 o 4, compramos unas motos y nos fuimos todos a recorrer el país, por ejemplo", expresó y dejó ver su pensamiento al respecto.
"En una panadería se trabaja todo el tiempo, muy intensamente, con el otro. Hay que llevarse bien. A mí me gusta que la gente esté bien y venga a trabajar contenta", dijo.
En la casa, el hombre afirma que se van turnando y que cada uno la usa aproximadamente dos semanas al año. Él paga todo, con traslado incluido, salvo la comida. "Y después aparte tienen sus vacaciones, claro", dice Emilio, que para él es un tema común.
Por último, deja una conclusión que debería ser tomada por muchos empleadores: "Yo vengo de abajo, yo sé qué necesitan los empleados. No puede ser que te estén controlando si llegás 5 minutos tarde, que te descuenten eso del sueldo. Así no se trabaja bien. Hay que cambiar esas cosas".