El 29 de julio de 2010, Carolina Píparo era protagonista involuntaria de una tragedia: era baleada en una salidera bancaria y perdía su embarazo. Iba a ser su primer hijo. Entonces trabajaba en el Ministerio de Justicia y Seguridad bonaerense.

Pasó el tiempo y, como pudo, cargando con el inmenso dolor de la pérdida, Píparo recompuso su vida: pasó a trabajar en el Banco Provincia de Buenos Aires y este año se convirtió en diputada provincial de Cambiemos.

Como tal, como empleada del Bapro y ahora como macrista, fue uno de los legisladores que esta semana votó a favor del brutal ajuste previsional contra sus compañeros de trabajo, que aumenta la edad jubilatoria y baja los haberes de los jubilados.

De modo que los empleados del Banco decidieron declararla “persona no grata” y reclamaron que “no vuelva más al banco”, según trascendió en las redes sociales.

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