La importancia del lenguaje corporal al dormir pudo ser comprobada recientemente por el investigador británico, el Dr. Chris Idzikowski, quien es un experto en sueño y una reconocida autoridad en salud en varias universidades norteamericanas.

Recientemente realizó una investigación en la que entrevistó a más de 100 personas sobre sus hábitos de sueño, y de la cual pudo sacar diversas conclusiones. Éstos son los resultados.

1- Si doblás las rodillas mientras estás acostado de costado sos una persona tranquila y confiable. No es fácil ofenderte, y no tenés miedo a lo que pueda pasar en el futuro. Por la mañana te levantás con una sonrisa, sea el día que sea.

2- La posición fetal denota que sentís la necesidad de ser protegido, comprendido y que te compadezcan. De esta manera intentás aislarte de los problemas del mundo que te rodea y sos un individuo con una personalidad artística.

3- Si dormís boca abajo con los brazos y las piernas a un lado, sos un líder: impulsivo y con iniciativa. Además te asegurás de que haya un orden tanto en tu vida personal como profesional. Preferís tener todo planeado y te caracteriza la perseverancia.

4- Si estás acostumbrado a dormir boca arriba, lo más probable es que seas una persona positiva que ama la vida y que está acostumbrada a ser el centro de la atención. Sos trabajador y a menudo tenés momentos fuertes de tu personalidad.

5- La posición de soldado, acostado boca arriba, denota que sos una persona equilibrada, con metas claras y que se esfuerza por alcanzarlas. Podés ser estricto, pedante y exigente, sobre todo contigo mismo.

6- Si dormís como una garza, con una pierna doblada, lo más probable es que tengas una personalidad impredecible que te involucra en todo tipo de aventuras. Al mismo tiempo, tu estado de ánimo puede cambiar tan rápido que puede ser confuso para los que te rodean. Muy a menudo te resulta difícil tomar decisiones.

Si no puedes conciliar el sueño sin doblar las rodillas mientras estás acostado de lado, eres una persona tranquila y confiable. No es fácil ofenderte, y no le temes al futuro. Sonríes incluso en la mañana más triste de invierno, y puedes ajustarte sin problemas a prácticamente todos los cambios que ocurren en tu vida.Si no puedes conciliar el sueño sin doblar las rodillas mientras estás acostado de lado, eres una persona tranquila y confiable. No es fácil ofenderte, y no le temes al futuro. Sonríes incluso en la mañana más triste de invierno, y puedes ajustarte sin problemas a prácticamente todos los cambios que ocurren en tu vida.