Caso Dalmasso: la emoción del esposo al enterarse que el fiscal no presentará cargos
El médico Marcelo Macarrón, quien es juzgado por el femicidio de su esposa ocurrido en 2006 dijo que es "inocente" y se quebró al oír que el fiscal no pedirá condena.
El médico Marcelo Macarrón, quien está siendo juzgado por el femicidio de su esposa Nora Dalmasso, ocurrido en 2006 en la ciudad cordobesa de Río Cuarto, dijo que es “inocente” y agradeció “a quienes lo apoyaron”, en sus últimas palabras antes de conocer el veredicto que lo absolverá por el caso.
"Solamente quiero decir que soy inocente y que les agradezco a todos", fue lo que dijo Macarrón cuando el tribunal técnico de Río Cuarto le dio la posibilidad de pronunciar sus "últimas palabras" antes del veredicto.
El fiscal Julio Rivero dio un pormenorizado recorrido de la instrucción del caso y aclaró que no cuenta con pruebas suficientes como para acusar a Macarrón por el delito de "homicidio calificado por el vínculo, por alevosía y por precio o promesa remuneratoria en concurso ideal" de su esposa y que, ante ello, debe pedir su absolución.
"No puedo acusar por acusar", dijo Rivero, tras lo cual agregó: "No puedo sostener que la mató un sicario no solo porque no existe prueba de eso sino porque hay pruebas de que la víctima tuvo sexo consentido. El sexo consentido echa por tierra un acuerdo criminal".
El alegato fue escuchado atentamente por Macarrón, quien estuvo sentado en la sala de audiencias junto a su abogado Marcelo Brito. A pocos metros se hallaban sus hijos Facundo y Valentina, su hermano Juan, su cuñada y sus sobrinos, que acompañaron al viudo.
Para pedir la absolución, el fiscal hizo lugar "al principio de inocencia" ante la insuficiencia de pruebas que lo comprometan y pidió que “se pongan a disposición de la fiscalía la totalidad de las actuaciones para seguir investigando en procura de llegar a la verdad".
Sin embargo, técnicamente el caso quedará impune, ya que pasaron más de 15 años del asesinato, lo que implica la prescripción de la acción penal.
De esta manera, el jurado popular, tal como dispone la ley, no podrá pasar a deliberar para llegar a un veredicto, ya que sin acusación fiscal no puede pronunciar una condena.
En tanto, al no existir en este juicio una querella y, como el único impulsor de la acción penal -el fiscal- desistió de acusar, el tribunal técnico solo podrá dictar un veredicto absolutorio.
Tras un cuarto intermedio dispuesto el pasado 22 de junio, hoy se reinició la 39na. audiencia del juicio por jurados por el crimen de Dalmasso (51), al que Macarrón (62) llegó acusado del delito de "homicidio calificado por el vínculo, por alevosía y por precio o promesa remuneratoria en concurso ideal".
El fiscal que instruyó el caso, Luis Pizarro, al elevar el caso a juicio, consideró que la madrugada del 25 de noviembre del 2006 el viudo "planificó dar muerte a su esposa por desavenencias matrimoniales y con la intención por parte de su/s adlater/es de obtener una ventaja, probablemente política y/o económica".
No obstante, el representante del Ministerio Público que debió respaldar con pruebas esa acusación en el juicio cuestionó duramente la investigación llevada a cabo y dijo que no tiene pruebas para pedir una condena.
Momentos antes, el abogado de Macarrón, Marcelo Brito, solicitó en su alegato la absolución de su defendido y señaló que “la causa tuvo muchas irregularidades por ignorancia y negligencia”.
Al igual que lo había hecho en el alegato previo el fiscal Julio Rivero, el letrado cuestionó la investigación policial realizada en el marco del caso y sostuvo que hubo una “persecución direccionada hacia la familia Macarrón”, a la vez que instó a que se continúe buscando al asesino de Nora Dalmasso.