El grafiti mostraba a cinco palomas grises sosteniendo tres carteles con las frases "Vuélvete a África", "Los emigrantes no son bien recibidos" y "Mantente alejado de nuestros gusanos". Sus mensajes estaban dirigidos a otro pájaro, de color verde, que estaba aislado, en uno de los extremos del dibujo. Todo ese cuadro gigante que al principio parecía sólo una obra de arte callejera, fue borrado y era nada más y nada menos un mural de Bansky.

¿Dónde fue? En el ayuntamiento del distrito Clacton-on-Sea, en el este de Inglaterra. El mural del artista callejero británico Banksy. El mismo fue borrado por error, ya que lo consideraron "racista".

Valuada en casi 650.000 dólares, el Ayuntamiento lamentó haber perdido la obra que podría haberse convertido en una atracción turística para el lugar.

La aparición del mural en Clacton-on-Sea, un antiguo enclave vacacional en decadencia, fue pintado entre el lunes y martes de esta semana, días antes de la disputada elección del 9 de octubre en la que un legislador local por el Partido Conservador se pasó al radical UKIP, con una fuerte agenda antiinmigración y antieuropea.

El misterio que envuelve la figura de Banksy, así como el contundente mensaje de sus grafitis, que se han convertido en iconos anticapitalistas aumentaron el interés y la cotización por sus obras, que en los últimos años se convirtieron en piezas de coleccionista.