"Lo que le molesta a Gerardo Morales es que los negros nos hayamos organizado"
La activista y presa política Milagro Sala declaró en la causa por "amenazas coactivas" contra Gerardo Morales, delito por el cual ya había sido sobreseída.
La activista Milagro Sala declaró en la causa por el escrache que la Tupac Amaru realizó en 2009 al entonces senador y actual gobernador de Jujuy, Gerardo Morales. Dicha causa que enmarca un juicio oral, sostiene que la dirigente social es "co autora por instigación" de "amenazas coactivas y daño agravado".
La causa había prescripto debido al paso del tiempo por el mismo tribunal que hoy la juzga, pero la Cámara Federal de Casación Penal revirtió la medida.
La primera de las cuatro audiencias comenzó a primera mañana en el centro de San Salvador de Jujuy. En la sala, además de Milagro Sala, están presentes los miembros de la Tupac Graciela López y Gustavo Salvatierra, acusados de liderar la agresión.
La líder Tupac declaró por primera vez a casi un año de estar presa y luego de responder las específicas preguntas del juzgado, se explayó respecto a su detención y el odio, asegura, irracional, que tiene el gobernador de la provincia para con ella.
"Lo de Gerardo Morales es una persecución de ocho años que vengo sufriendo y siento que la molestia de él es que los negros nos pudimos organizar, que no dependimos de ningún sector político, y que le inculcamos a los compañeros que tenían que estudiar y preparase. Que no teníamos que bajar la cabeza con nadie. Los compañeros podían por primera vez construir sus propio futuro sin depender de los sectores políticos", sostuvo.
Respecto a su relación con el kirchnerismo, Sala indicó: "Cuando llegaron Nestor y Cristina al poder nosotros no queríamos trabajar con ellos, ellos vinieron a hablar y nosotros les decíamos que las decisiones pasaban siempre en asamblea. Queríamos seguir siendo autonomos del gobierno, hasta que de tanto empujar empujar, permitimos que ellos vengan a ver nuestro trabajo comunitario y se admiraron de lo que habíamos logrado y quisieron ayudarnos. Yo, coya y desconfiada, siempre les preguntaba a cambio de qué, a cambio de nada, respondían".
"Siento mucho el rencor que tiene Gerardo Morales hacia mi persona, en menos de 6 meses me llenó de tantas causas. Yo ya lo perdone, no le tengo bronca, al contrario, pertenezco a los pueblos originarios y nos enseñaron que a las personas que te hacen daño hay que perdonarlas, yo lo perdoné, lo único que si me duele es que los coyas sabemos que no se miente, no se roba ni se perjudica a alguien que no hizo nada", agregó.
Al hablar de su trabajo como militante y peronista, Sala remarcó: "soy muy idealista y devota de Evita, y las cosas que leía de ella sentía que la estaba realizando, y para mi era decir y hacer la revolución pero no sólo en los hechos sino en la cabeza. Poder lograr que el que menos tiene tenga una pileta, comida, trabajo, su propia tarjeta. Los compañeros pudieron tener su propia tarjeta, sus zapatillas. Teníamos que demostrar que eramos negros pero no vagos".
También se refirió a la acusación sobre el escrache al gobernador: "Teníamos 20 mil afiliados de Tupac y no se podía controlar a los 20 mil compañeros, pero en todas las marchas prohibíamos, por ejemplo, el alcohol. No me pueden haber involucrado en algo que no hice y si lo hubiese hecho estaba al frente de la manifestación, siempre estuve adelante en todas las luchas, no mando a mis compañeros a perder. Siempre di la cara, nunca me escondí, porque así me han educado y si metí la pata en algo doy la cara y siempre fui respetuosa de la asamblea, todo lo que se hizo se trato en asamblea, nunca hice nada que la asamblea no me haya autorizado".
La dirigente indicó que le daba "una profunda pena" que para se realizara este juicio oral tuvieran que suspender los de delitos de lesa humanidad: "Los abuelos, hijos y familiares vienen esperando hace mucho tiempo, 30 años y le dieron más importancia a la tirada de huevos que a los desaparecidos".
Por otro lado señaló a Morales y a Carlos Blaquier como responsables de su situación y de haber ejercido presión en la justicia. "Dicen que cuando una milita y hace cosas tienen consecuencias, buenas y malas, para mi fueron estas. Me la están haciendo sentir pero no le voy a dar el gusto de llorar, voy a ser fuerte y no me arrepiento de haber trabajado mucho por mis compañeros. Le pido a ustedes señores jueces y fiscales que no se dejen presionar, quiero creer que tienen independencia de justicia federal, porque en la provincial no hay independencia, apretaron para que esta negra, esta coya y esta mal hablada vaya a la cárcel y se dieron el gusto".
Y reiteró: "Si yo hubiese estado en la tirada de huevos, hubiese estado en la cabeza, no estoy acostumbrada a mandar a perder a mis compañeros. Gerardo Morales no se dedico a gobernar, se dedicó a llenar mi causa, el pueblo jujeño necesita que gobierne".
Además denunció persecución política y condiciones indignas: "Despidieron compañeros por solo estar en el acampe, si eso no es persecución, qué es. Estoy escribiendo un libro, estoy escribiendo todo lo que me esta pasando como presa política. Tenía derecho a tener un psicólogo pero me lo sacaron y me impusieron a una mujer que trabaja con quienes me están armando esta causa. Me quisieron sacar la dignidad y no pudieron, lo único que falta es que me quieran sacar la pecera y el cuaderno que escribo todos los días. No me van a sacar lo que pienso, me podrán callar pero el pensamiento no me lo van a sacar nunca".
A las 15 se abrirá el micrófono para escuchar a los más de 15 testigos. El gobernador y denunciante del episodio no estará presente pero realizó un escrito para la ocasión. Además declarará el auditor general de la Nación, Alejandro Nieva; uno de los afectados del escrache, y el ex diputado radical y actual director del Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) Miguel Ángel Giubergia.
Pese a la opinión de organismos internacionales importantísimos, el gobierno continúa presionando a la Justicia para que Sala no sea liberada. La líder Tupac también declarará este jueves y lo hará por primera vez, la expectativa es grande.