El organismo de control estatal de comunicaciones de Rusia presentó, la semana pasada,  una demanda para limitar el acceso a la aplicación de mensajería Telegram en ese país y finalmente la justicia hizo caso a ese pedido y ordenó el bloqueo de la misma. 

El Tribunal del Distrito Taganski tardó menos de media hora en estudiar las pruebas presentadas para la demanda y la decisión llegó en ausencia de abogados de Telegram, ya que el creador de la 'app', Pável Dúrov, les había prohibido "legitimar con su presencia una franca farsa".

El pasado el 20 de marzo, Durov- que se encuentra exiliado por considerarse un perseguido por parte del Gobierno ruso- dijo a través de su cuenta de Twitter que rechazaría cualquier intento de bloquear Telegram y que la compañía "defenderá la libertad y privacidad".

Según Telegram, la orden de los servicios de seguridad  rusos (FSB) viola el principio constitucional del secreto de la correspondencia, ya que con las claves de cifrado proporcionan al servicio de seguridad el acceso a los mensajes de cualquier usuario.

La decisión judicial señala que el bloqueo de Telegram podrá ser levantado si entrega al FSB los códigos de cifrado de las comunicaciones entre sus usuarios.

En octubre del año pasado Telegram Messenger fue multada con 800.000 rublos (unos 14.000 dólares) por incumplir esta norma, adoptada en el marco de las medidas para luchar contra el terrorismo. El servicio de mensajería es acusado de facilitar las comunicaciones entre terroristas del grupo Estado Islámico.