No hay que ser muy inteligente para darse cuenta que esta "broma" le iba a caer mal.

Le sacó a su novia una vergonzosa foto mientras dormía y después se la tatuó en su pierna. Los protagonistas: un pareja oriunda de la ciudad portuaria de Portsmouth, ubicada al sur de Inglaterra

James McGraw, de 40 años, le sacó una foto a su esposa, Kelly, de 37, durante un vuelo en sus últimas vacaciones mientras ella dormía. Esa embarazosa imagen fue la que escogió James para tatuarse en su pierna. 

Cuando Kelly vio el tatuaje no lo pudo creer y, al principio, se enojó. “Hay una delgada línea entre lo que es gracioso y lo que no. Somos una familia normal, pero esta broma se salió de control”, había dicho la joven al periódico británico The Sun.