Una escuela y un ex centro de detención clandestino en peligro
Se trata del centro educativo Isauro Arancibia y del excentro de detención Club Atlético, ubicados dentro de la traza donde se proyecta el nuevo metrobus. A pesar de los pedidos de vecinos por preservarlos, el gobierno macrista se mantiene en silencio.
El “Metrobus Paseo Colón” fue anunciado por el Jefe de Gobierno porteño en octubre del año pasado. La nueva obra conectará el barrio de La Boca con la Plaza de Mayo, pero el proyecto ni las obras fueron autorizadas por la Legislatura.
De la Autopista 25 de Mayo, sobre Paseo Colón y Cochabamba, cuelga una bandera que dice “No al Metrobus, la educación y la memoria no se derrumban”. Esto se debe a que la "nueva traza del Metrobus" implica demoler el Centro Educativo Isauro Arancibia, uno de los edificios –junto a la Escuela Taller del Casco Histórico, el Centro de Atención Integral a la Niñez y Adolescencia (Caina) y el ex Centro Clandestino de Detención y tortura El Atlético– que corre riesgo de desaparecer.
El legislador de Seamos Libres, Pablo Ferreyra y la legisladora del Frente para la Victoria, Lorena Pokoik se sumaron al apoyo al Isauro Arancibia: “No tuvimos respuesta del pedido de informe que presentamos ante la subsecretaria de Equidad, Sol Acuña y al propio ministro Bullrich para que expliquen qué es lo que va a pasar con el Isauro Arancibia por las obras del Metrobús”.
Pokoik exclamó: “Es una situación complicada. El trazado del Metrobús se va a llevar puesto varias propiedades, entre ellas esta institución pública que alberga a un montón de chicos en situación de calle, sometiéndolos a una situación de doble exclusión”.
Vecinos del barrio de San Telmo y representantes de distintas organizaciones protestaron de manera reiterada contra la demolición de los edificios.
“Acá está el ex centro de detención Club Atlético que es un monumento histórico, en el que están haciendo excavaciones arqueológicas y recién se ha excavado el diez por ciento”, expresó Susana Reyes, coordinadora Isauro Arancibia.
“La Ciudad nos dice que nos va a conseguir otro lugar pero nosotros no sólo no les creemos, sino que no podemos irnos de la zona porque abandonaríamos a los chicos que todos los días hacen el esfuerzo para venir a la escuela a estudiar y a aprender un oficio”, agregó Reyes.
El PRO ya envió intimaciones para que todas estas construcciones sean desalojadas porque entienden que la realización del Metrobus es una “prioridad, considerando al mismo útil para el tránsito vehicular y el desarrollo de la Ciudad", y avisó que "en caso de ser necesario” van a “requerir el auxilio de la fuerza pública".