Tailhade criticó a la AFI por propiciar el “espionaje político y las operaciones contra los opositores”, y englobó el caso en un contexto regional, como lo ocurrido con Lula da Silva en Brasil.

“No tengo ninguna duda que esto es una operación de inteligencia, con la fabricación de cuadernos”, dijo Tailhade. “Esto requería que no aparecieran los originales, y el Gobierno estuvo al tanto desde el primer minuto”, consideró. “El periodista de La Nación recibió el material en enero y lo devuelve en abril y luego se presenta ante Stornelli, así que el Presidente no pudo no saber entre enero y abril que esto existía”, agregó.

El legislador apuntó a Jaime Stiuso. “Tiene poder, el poder tiene diversas expresiones, él tiene plata e información”, manifestó sobre el ex agente de inteligencia. “Sabe mucho desde los tiempos de los sobresueldos de Menem a los jueces y puede acceder a equipamiento que pueda ser útil para técnicas de espionaje”, añadió sobre un espía “con muchos años en los servicios” y que “sabe hacer estas cosas, debe ser el mejor”. Así, aseguró que “la AFI de Macri está puesta a disposición del espionaje político, con o sin Stiuso”.

Tailhade objetó el procedimiento del juez Claudio Bonadio en la requisa de este juez por no permitir la presencia de abogados de la ex presidenta y actual senadora. “El juez puede avalar su exclusión en casos muy específicos, no en éste”. Además, recordó que Carlos Berardi, el abogado defensor al que se negó la permanencia en el domicilio porteño de la ex mandataria “esperaba a la delegación policial y la ley dice que quien abre la puerta tiene que estar presente, no importa quién sea”. Y definió como “una suerte de desalojo del departamento” lo que ocurrió, dado que “la orden era para el registro, no había nada por escrito que avalase la exclusión de alguien del lugar”.

Sobre el hecho consumado del allanamiento, Tailhade justificó los temores expuestos por Cristina en la sesión del Senado en la que se aprobó el allanamiento. “Al juez se le recordó que debía proceder con recato y decoro por la investidura de una senadora que fue dos veces presidenta de la Nación, y Cristina había pedido la presencia de senadores, cuánta razón tenía”. Al mismo tiempo, consideró que “había mentira en el razonamiento” del senador Miguel Pichetto, “que falla al decir que no había conspiración y no se justificaba la paranoia”.

El diputado afirmó que lo vivido fueron “trece horas de máxima centralidad en los medios dominantes” y que sirvió para “estigmatizar” a la senadora. “Fue un circo, estirado para ser la noticia del año, no porque se precisara ese tiempo para hacer evaluaciones y exámenes”. Irónico, expresó que “estoy seguro que habrá revelaciones, como un perro que ladró por una bolsa de cuero con dinero” y recordó que en TN “se dijo que llevaban tecnología de punta para detectar el olor a dólar”.

El objetivo es, en su opinión, “fabricar pruebas para justificar el desafuero y el pedido de prisión para Cristina”, y que en el fondo “no tienen intención de investigar en serio”, en un contexto en el que “hay un tablero más grande que el local”. Recordó que el embajador de Estados Unidos es un ex juez y por ende “sabe cómo funciona el Poder Judicial y aprovecha la genuflexión clásica de los jueces más conocidos, que cada 4 de julio van a la embajada besarle el anillo”.

Finalmente, habló sobre José López, el ex secretario de Obras Públicas que ahora figura en la causa como arrepentido. “No me sorprende, lleva dos años detenido y me dicen que con problemas de salud”, dijo Tailhade en declaraciones a FM La Patriada."Me llegó el dato de que tuvo un ACV en este período de detención y que no fue tratado con la seriedad que corresponde a ese cuadro”. Así, dijo que “hay tortura psicológica en la cárcel, que se suma al escarnio público”, y rememoró que en el caso Lava Jato, en Brasil, “se anuló el testimonio de un empresario preso porque se dieron las condiciones para una crisis psicológica”. Cerró considerando que “esto es un desastre en términos institucionales”.

Fuente: Página 12